jueves, 14 de enero de 2010

Merkel exige a Zapatero un plan de economía creíble

El Gobierno de Angela Merkel volvió a rechazar ayer la estrategia económica que el presidente español, Jose Luis Rodríguez Zapatero, ha formulado en los últimos días.
Zapatero y Merkel, durante la cumbre del G20 en Londres | Foto Efe

Zapatero y Merkel, durante la cumbre del G20 en Londres | Foto Efe

“Primero se debe plantear la fórmula de crecimiento, basado en unos objetivos realistas, antes de pasar al capítulo de las sanciones”, declaró el portavoz gubernamental, Christoph Steegman.

Zapatero ha explicado su estrategia a la prensa antes que a sus homólogos

Berlín celebra, en cambio, que la Presidencia de turno española quiera englobar a los veintisiete países de la Unión Europea y no sólo a los miembros del euro en sus objetivos para la próxima década.

De las palabras del portavoz de Merkel se deduce que el Gobierno alemán está, cuanto menos, sorprendido por la estrategia diplomática de la Presidencia de turno española en la UE, pues las propuestas económicas se han explicado antes a los corresponsales extranjeros en Madrid que a los ministros o a la cancillería.

“Entre la canciller y Zapatero no ha habido, por el momento, ningún contacto directo sobre este tema, más allá de un correo electrónico que la Presidencia española remitió a la Cancillería el pasado viernes”, señaló Steegman ayer en la rueda de prensa de portavoces alemanes.

El titular de Economía, el liberal Rainer Brüderle, consideró este fin de semana, tras las informaciones que aparecían en la prensa alemana, “exageradas y erróneas” las ideas de Zapatero para la Unión Europea. “La propuesta de sancionar a los países miembros si no cumplen con los objetivos previstos no tiene sentido.

La actual estrategia de Lisboa se basa en un enfoque cooperativo sin sanciones, y así debería seguir siendo en adelante”, afirmó Brüderle a los medios de comunicación. “Lo correcto es coordinar de forma efectiva y mejorar el mercado interior, pero generar una mayor burocracia para sancionar, lo considero exagerado y erróneo”.

Brüderle expresó su apoyo a “coordinar de forma más efectiva” la política económica de los Veintisiete, pero como ayer confirmó Steegman, Berlín, como Londres y algunos otros países de la UE, han sido siempre recelosos a establecer un “gobierno económico” para la Unión.

Berlín y Londres siempre han recelado de un gobierno económico único para Europa

Si los socialdemócratas alemanes en la oposición no han reaccionado, sí lo hicieron los Verdes. El representante de este partido en el Parlamento Europeo, el alemán Reinhard Bütikofer, indicó que en los planes de la Presidencia española “no se reconoce qué tipo de crecimiento quieren fomentar”, para añadir que “la calidad del crecimiento de la UE es fundamental”.

Ya el fin de semana, los periódicos más influyentes de Alemania mostraban en sus editoriales escepticismo sobre los planes de Zapatero.

El conservador Frankfurter Allgemeine tildó de “sorprendentes” las propuestas de sanciones de Zapatero para los objetivos económicos. “Una idea así solo puede venir de un país donde sus ciudadanos no consideran las intervenciones de Bruselas como una contrariedad, sino como una bendición”.

De hecho, “España es el país que más ayudas ha recibido de los distintos fondos europeos en los últimos veinte años”, escribía el Frankfurter. “Por eso, el presidente de turno de la UE busca para España, que sufre especialmente por la crisis, refugio en Bruselas. Zapatero tiene la esperanza, al parecer, de que con compromisos vinculantes, podrá usar más subvenciones” como muletas para “los serios problemas de España”, opina el periódico de Fráncfort.

http://www.expansion.com/2010/01/11/economia-politica/1263248318.html